¿Sabías que la música que suena en tu supermercado puede hacer que los clientes compren más... o menos? La mayoría de dueños de supermercados no lo saben, pero elegir la música adecuada puede ser una de las decisiones más estratégicas para aumentar ventas, mejorar la experiencia del cliente y que las personas quieran volver. Sigue leyendo, porque te diremos exactamente qué tipo de música funciona mejor y por qué.
La música activa emociones en nuestro cerebro. Y las emociones influyen directamente en cómo compramos. En un supermercado, donde la gente camina, explora y toma decisiones casi sin pensarlo, la música puede guiar ese comportamiento sin que se den cuenta.
Estudios en neuromarketing han demostrado que una buena ambientación musical para supermercados puede aumentar el tiempo de permanencia, reducir el estrés y hacer que el carrito se llene más.
La respuesta depende del tipo de supermercado y del momento del día. Aquí te damos una guía rápida:
Canciones con ritmos lentos hacen que los clientes caminen más despacio. Esto les da más tiempo para ver productos, tomar decisiones y comprar más. Ideal para horarios de baja afluencia.
Durante los momentos de más movimiento, es mejor usar melodías con un ritmo medio y alegre. Esto mantiene el ambiente activo, sin generar estrés.
Evita letras que distraigan. Usa música instrumental o en idiomas que no sean los del país para que el foco siga en la compra, no en la canción.
Jazz suave
Pop instrumental
Bossa nova
Chill out
Música lounge
La clave está en que la música sea coherente con el público y el tipo de supermercado. No es lo mismo un supermercado gourmet que uno de descuento.
No uses radio comercial: interrumpe la experiencia y distrae.
No pongas música muy alta: genera incomodidad.
No repitas las mismas canciones todos los días: se vuelve monótono.
Una forma efectiva es dejarlo en manos de expertos. Empresas como Sensem Audiomarketing & Plus se especializan en crear listas personalizadas de música para supermercados, adaptadas a tu marca y a tus horarios. Así, no solo suena música, sino que suena estrategia.